En los últimos años, según INEI, la población se incrementó a una tasa de crecimiento anual de 1,13%. En Lima, aproximadamente hay 8 millones 617 mil habitantes, lo cual es un exceso de población para el territorio limeño. Esto lleva a las personas a adquirir viviendas más pequeñas y a la reducción de áreas verdes recreativas. Dado el hecho de que el perro es la mascota preferida por las familias limeñas, ellos deben convivir con sus dueños en espacios cada vez más pequeños, lo cual puede repercutir en su salud física y mental. La escasez de áreas verdes afecta a las mascotas ya que no tienen un espacio para desenvolverse y liberar el estrés que genera vivir en un departamento.

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En 6 años, 10 distritos disminuyeron sus parques y jardines en 2.4 millones de metros cuadrados. El índice de áreas verdes por ciudadano es de 2.71 m2/habitante. Las personas necesitan un espacio para liberarse de las tensiones de la vida cotidiana, ya que los espacios públicos fomentan la recreación y la integración social. Según La Organización Mundial de la Salud los espacios verdes urbanos son imprescindibles por los beneficios que aportan en cuanto a bienestar físico y emocional. La realidad es que cada vez hay menos espacios verdes urbanos, del cual no solo requieren las personas, sino también sus mascotas caninas.

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Los perros necesitan salir a pasear por lo menos 2 veces al día, según expertos en adiestramiento canino, de lo contrario pueden llegar a contraer enfermedades relacionadas al sistema nervioso y urinario. En el libro “Las normas de Cesar Milán. Cómo fomentar el equilibrio entre usted y su perro.” Un perro equilibrado es aquel que se lleva bien con otros perros y con las personas, para ello requiere del espacio adecuado para desenvolverse.

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En algunos países europeos existen las “Áreas de recreo para perros”, que son espacios exclusivos que favorecen la interacción entre ellos, así como entre los propietarios que comparten su amor por estos animales. Dichas áreas están implementadas con elementos destinados al sano desenvolvimiento de los canes tales como: bebederos adaptados para perros, amplio espacio rodeado por vallas, plantas, tachos de basura cercanos y material recreativo.

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Asimismo, es importante la preservación de jardines, parques y zonas verdes, porque son elementos clave para mantener una buena calidad de vida en las ciudades y favorecer al bienestar de los usuarios. Un perro produce en promedio 300 gramos de heces y  medio litro de orina al día, “El suelo absorbe la orina, pero el excremento se seca, se pulveriza y sus partículas viajan en el ambiente y pueden terminar en los alimentos que se consumen en la vía pública o las podemos respirar” explica el jefe de la Facultad de Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional  Autónoma de México. Es necesario crear conciencia en los dueños de mascotas sobre la importancia de preservar las áreas destinadas a la recreación, de lo contrario nos exponemos a enfermedades e infecciones.

Por el crecimiento urbano en Lima actualmente, cada vez los espacios para vivir son más reducidos. Podemos observar que se ofrecen de alquiler y venta en inmobiliarias, departamentos de 70mts2 y tamaños similarmente pequeños, en los que conviven familias de 3 a 5 integrantes que además cuentan con la compañía de una mascota. Dichas mascotas no suelen ser siempre de razas pequeñas, por lo que uno podría cuestionarse la calidad de vida que llevan no solo las personas sino también los animales que viven en tales espacios. Una mascota requiere el espacio necesario en proporción a su tamaño para satisfacer sus necesidades básicas y de recreación.

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Las personas deberían tener en cuenta la disponibilidad de espacio en su hogar antes de adquirir una mascota, asegurarse de proveerle la comodidad y cuidados básicos, pues es esencial para el desarrollo de una mascota saludable y vivaz. Por otro lado, deberían exigir a sus municipalidades el debido mantenimiento y conservación de los espacios verdes urbanos, ya que traen muchos beneficios de salud.